Manual de Supervivencia para Chicas Frioleras (con Estilo, Claro)
/ Nov122025No nos engañemos: el frío ha llegado y no piensa irse.
Pero eso no significa que tengas que rendirte ante el abrigo aburrido, la bufanda XXL o ese jersey heredado del 2012.
Porque hay una realidad universal: ser friolera no está reñido con tener estilo. ❄️✨
Y sí, también se puede sobrevivir al invierno sin parecer una cebolla de lana.
Solo necesitas actitud, una buena playlist y —obvio— una chaqueta personalizada que diga “tengo frío, pero también tengo personalidad”.
1. Si vas a taparte, que sea con arte
Hay quien se abriga.
Y hay quien se envuelve en una historia.
Porque una chaqueta personalizada no solo protege del frío, también te recuerda quién eres cuando el mundo se vuelve gris.
Pinceladas, tachuelas, flecos, brillo o frases con carácter… cada detalle es un recordatorio de que la moda puede ser abrigo y declaración de intenciones a la vez.
2. El negro nunca falla (y menos si lleva flecos)
Mientras medio mundo se lanza a por el plumífero beige, tú sabes que el negro es tu mejor aliado.
Pero no hablamos de cualquier negro.
Hablamos de ese tono profundo que se mueve con cada paso, con flecos que bailan y reflejos de perlas que atrapan la luz.
Una cazadora personalizada transforma cualquier look sencillo en pura actitud.
3. Regálate (o regala) algo que no dé frío… sino calorcito al alma
Los guantes se pierden, las bufandas aburren…
Pero una chaqueta personalizada se queda para siempre.
Es el regalo original perfecto: abriga, emociona y se puede personalizar con frases, nombres o símbolos que signifiquen algo de verdad.
Ideal para ti, para tu mejor amiga, o para esa persona que te soporta incluso cuando te quejas del frío por quinta vez en el día.
️ 4. Adiós a las prendas sin alma
La moda rápida puede darte calor, sí, pero nunca te dará identidad.
Las prendas hechas a mano tienen otra energía — se sienten, se viven y se recuerdan.
En I’m Sorry Mama cada chaqueta se pinta, se cose y se decora con mimo, con esa rebeldía que hace que una prenda deje de ser “ropa” para convertirse en algo tuyo.
Tu segunda piel.
✨ 5. Porque la elegancia también tiembla (pero brilla igual)
Las chicas frioleras sabemos de resistencia: sobrevivimos a bodas en exterior, terrazas con calefactores apagados y cafés que se enfrían antes de la primera foto.
Y aun así, sonreímos, posamos y seguimos brillando entre capas.
Porque el frío pasa… pero el estilo, el arte y la actitud se quedan.
Así que ya sabes…
Este invierno no te escondas bajo mil capas.
Mejor invéntate tu propia versión del abrigo perfecto:
una chaqueta personalizada que te abrace, te represente y te recuerde que hasta en los días grises… sigues siendo arte.
Descubre cómo crear la tuya www.imsorrymama.es
Envíanos un Whatsapp y te atendemos súper rápido
